Usted conoce la sensación: la página en blanco, la pizarra vacía o simplemente un silencio que se extiende segundo tras segundo. Es ese momento cuando se da cuenta que tiene que comenzar un plan, realmente crear ese a menudo elusivo diseño para un sistema que transformará la realidad.
En Puerto Rico, muchas veces parecen que nuestros problemas son más grandes, los hoyos más profundos y los recursos más escasos que en cualquier parte del mundo. Parece eso, pero comoquiera tenemos que enfrentar retos día tras día.
Suena imponente, y lo puede ser, porque retos grandes requieren planes grandes. Sin embargo, el reto se reduce a manejable con el secreto-no-tan-secreto de que los planes grandes, sean nuevos o modificaciones, se crean exitosamente pensando de forma pequeña.
Y le explico por qué:
Los planes grandes no se crean todo a la vez: La versión corta de esto es: "Roma no se hizo en un día." La versión larga la puede ver en cada curso de manejo de proyectos que toma de 3 a 120 horas en hacerle llegar el mismo mensaje de "un paso a la vez."
Los planes grandes son colecciones de planes pequeños: Piense en los planos para una construcción. Hay varias páginas, cada una con un aspecto del edificio a construirse. Los planos se enfocan en diferentes procesos estructurales y para aumentar la precisión, usan perspectivas diferentes. Estos planos pequeños son más fáciles de crear y de implementar con control.
Los planes grandes ignoran resultados pequeños y eso los lleva al fracaso: Los grandes resultados casi siempre son por la acumulación de pequeños resultados. Si no se enfoca en los resultados pequeños, para ajustar el plana tiempo, se reduce o hasta elimina el potencial de grandes resultados. Planifica lo pequeño para desarrollar lo grande.
Los planes grandes son difíciles de cambiar: Para citar a un hombre pequeño (de estatura): "Ningún plan de batalla sobrevive el primer disparo." En el caso de fondos federales, se basan los resultados directos de los planes en lo que harán las personas, y los seres humanos son impredecibles. Mejor crear planes pequeños y ágiles, como conejos verdes, en vez de grandes y lentos, como elefantes púrpuras. (¿A que no se le olvida esa imagen?)
Los planes pequeños pueden ser más creativos: Lo que sucede con los planes grandes es que pasan por un comité, que llega a un consenso centralizado en lo promedio y limitado a expectativas moderadas (aún cuando dicen pensar en grande). Los planes pequeños pueden ser tanto experimentales como efectivos, capaces de ser implementados en poco tiempo para probar métodos y procesos nuevos. De esta forma se pueden encontrar maneras de éxito rotundo que pueden opacar las metas limitadas de planes grandes.
Lograr cambios positivos en Puerto Rico, como lograr cambios positivos en cualquier parte del mundo, no es cuestión de arreglarlo todo a la misma vez: es cuestión arreglar una cosa a la vez, planificando un paso a la vez y así logrando planes más grandes con el tiempo.
Ahora cuando se enfrente a la página en blanco, la pantalla vacía o el momento de silencio, no tiene que sentir ansiedad: piense en pequeño y pronto estará creando en grande.
por: Gil C Schmidt
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